Jueves 21 hs, corría una suave brisa
que alentaba a estar al aire libre; después de muchos días de haber sufrido una
ola de calor que parecía interminable (solo fueron 3 días en realidad). En fin,
nos propusimos con los muchachos juntarnos a tomar unas cervezas en un bar, el
lugar elegido fue en la esquina de Mariano Fragueiro y José Baigorri justo en
frente de la plaza de Alta Córdoba (Plaza Rivadavia, para los sabelotodo).
Hacía mucho que no nos juntábamos, un
jueves. Siempre los días de reunión eran los martes ya que el “Gordo” Landy tenía
franco ese día, ahora está desempleado así que lo invitamos a tomar unas
birras, para levantarle al ánimo.
Bueno nos juntamos el Landy, Shoy y
yo. Iba a venir Marcos también pero nos canceló a último momento, como de
costumbre, había empezado a salir con una piba que lo traía de las narices así
que al toque nos dimos cuenta de que prefería el amor antes que la amistad: o
no…
-Siempre es lo mismo con este tipo, se engancha con una fulana y ¡Sonamos!
mueren los amigos…
-Pará gordo ¿Qué te calentás? si vos
también cuando empezaste con Mayra nos dejabas regalados a nosotros y nadie te decía
nada- Nos reímos un rato con el gordo, pero Shoy:
-La vieja indecisión: ¿El amor
o la amistad? ¿Saben desde cuándo
está planteada esta pregunta? ¡Desde tiempos inmemoriales! ¿Y saben los que la
encontraron? ¡Los amantes! Claro, ellos deciden su amor mientras nosotros nos
peleamos por migajas. ¿Qué era un Marcos ocupando un espacio físico en esta
silla vacía, si su mente y alma estarían pensando en la fulana? Seguramente iba
tomar unos traguitos y sonreír como idiota para que no le preguntemos que le
pasa o que está pensando porque…
-Señores ¿Les tomo el pedido?- interrumpió
la hermosa y joven mesera
-Tres pintas rubias y unas papas con chédar- ordenó el
gordo sin titubear mientras yo me enamoraba de la sonrisa de la mesera, hasta
que Shoy chasqueo los dedos para despertarme de mi letargo platónico y
proseguir con su planteamiento en defensa del amor, pero el gordo se le
adelantó.
-Mejor que no vino, porque si hablamos de futbol “La Gloria” perdió de
nuevo…
-Y El Cholo Guiñazú se retiró,
entre otras noticias…- agregué ya que la noticia me había conmocionado,
Talleres quedó eliminado en la pre fase de la libertadores y su máximo referente
colgaba los botines, doble golpe para los hinchas de la “T”.
-Ese tipo sí que superó la barrera del amor y la amistad, si. En la relación
hincha-club lo aman y en la relación
persona-jugador hay una amistad como
la de nosotros, él demostró siempre ser más persona que jugador y ¡Ojo que no
estoy diciendo que no era profesional! Me
refiero a que se lo ve como que vos Mati te levantes de acá y te vayas a jugar
un partido de La Superliga y cuando terminas volvés acá al “Café La Plaza” a querer levantarte a la pibita que te vende la birra, ¿Me entendés
no?... -
Era la primera vez que Shoy hablaba
tanto de futbol, se ve que le afecto lo
del Cholo.
Él no era fanático de ningún club de futbol, aunque no simpatizaba por Los
Piratas de Belgrano. En ese momento vino el mozo con el pedido del gordo.
-¡Mirale la sonrisa al mozo ahora Matias!- me burlaba
el gordo mientras se echaba a reír.
-La eterna discordia de las comparaciones- decía Shoy
después de saborear el primer trago -qué
si las rubias o las morochas, qué si Talleres o Belgrano, qué si Peronistas o
Radicales, qué si Maradona o Messi…
-¡Maradona, obvio papá! ¿Qué duda te queda?
-¡Messi, ignorante! ¡Vos no sabes
nada de futbol gordo!- le retrucaba yo solo para molestarlo.
-¿Ven? A eso me refiero. Hay genios, punto. Einstein con La Relatividad General
no es mejor que Newton con la Ley de Gravitación Universal. ¿Por qué? Porque
son de épocas distintas, porque las
preguntas que la comunidad científica tenían en ese momento eran
correspondientes a su propio paradigma,
en términos de Thomas Kuhn.
-¿Pariente del Kun Agüero?- simpatizó el gordo, pero Shoy no
lo escuchó.
-Maradona y Messi responden a épocas diferentes en la pregunta de ¿Quién es
el Mejor? Y sabrá Dios a que se referirán los periodistas medio pelo a la
palabra “mejor”. Porque ahí sobran diferencias entre las estadísticas de ambos
jugadores, por ejemplo en cantidad de goles. Hablando nada más que de la selección.
Porque ahí está la súper trampa mediática para mantenernos en espiral hacia esa
pregunta. Porque desde el vamos Messi rompe todos los records a nivel clubes contra
cualquier jugador, pasando por arriba a Maradona. Pero en la selección… en la selección
el máximo exponente es la copa del mundo. Terminamos con la pregunta diciendo
Maradona 1 Messi ninguna. Y listo, fin, terminó. Ah pero los periodistas tercos
como la mula deciden plantearla a la misma pregunta en otros ámbitos, como ser:
“Messi no le hizo el gol a los Ingleses” a modo de “Newton no explico que la medición
del espacio dependía de la aceleración de la masa” y entramos en un pelotudeo
fuera de las estadísticas. El planteo para terminar con la pregunta es:
Maradona fue el mejor en su época y logró éxitos impensados y Messi es el mejor
en esta época y logró éxitos impensados.
Contento por resolver la angustiosa
y universal pregunta nos miró fijo a los ojos a los dos. Después agarro una
papas y las saboreó, levanto el vaso y nos invitó a un brindis.
Las conversaciones siguientes no
fueron de la talla de esta, seguramente por las papas con chédar.
En fin, las comparaciones pueden
hacerse en contextos similares, en categorías compartidas y aun así serán relativas
a quien lo mida. Y los datos siempre, siempre deben estar sujetos a dudas, solo
así se seguirá avanzando.
Las certezas son puentes hacia otras certezas
y las verdades son solo aceptaciones de un grupo dominante del paradigma en el que
se encuentran.
¿Coincidís en como lo sintió Mati? ¿Shoy te sugiere
otra reflexión?
Te invito a continuar leyendo mis
publicaciones.
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